Por Miss Resi Pfennich
Directora Colegio Copán
Equilibrando la Vida Profesional y Familiar con Éxito
Muchas personas me preguntan cuál es mi secreto para poder llevar una dirección general de un colegio de 2,500 alumnos, gestionar una empresa de capacitación para docentes y administrar un departamento en renta en Airbnb ¿Cómo es posible llevar adelante estas tres grandes empresas y aún tener tiempo para cuidar a mi familia, mi matrimonio, tener una relación estrecha con mis hijos, mantener una vida sana, ejercitarme 4-5 veces por semana y comer de manera saludable? ¿Cómo es que me alcanza la vida para leer, escuchar conferencias, escribir artículos y tener una vida espiritual sólida, dedicarme a la oración, la meditación, escribir mi diario, pasar tiempo con amigos, ir al bosque a caminar, disfrutar de la vida entre otras muchas cosas? Esto puede parecer imposible, y más en una ciudad tan complicada como la Ciudad de México.
El Gran Secreto: Comenzar Pequeño
Hoy quiero compartir mi gran secreto: empieza por algo pequeño. Los grandes cambios se logran paso a paso.
El Primer Paso: Hidratarse al Despertar
Una buena manera de iniciar es tomando un vaso de agua al despertar cada día. Esta simple acción puede marcar una gran diferencia. Incorporar este hábito saludable ayuda en primer término a hidratar el cuerpo después de varias horas de sueño sin consumir líquidos. La hidratación te permitirá tener la mente más despejada y lista para comenzar el día. El cerebro, constituido en un 75% por agua, necesita estar bien hidratado para funcionar de manera óptima. Además, el estómago se beneficia al tomar agua en la mañana, ya que facilita la digestión y puede ayudar a incrementar el metabolismo, apoyando la pérdida de peso y la eliminación de toxinas. Dicen que el estómago es nuestro "segundo cerebro", y al proporcionarle la hidratación necesaria, podrás asimilar mejor los nutrientes de los alimentos, brindándote la energía para empezar el día con fuerza.
Construyendo sobre el Hábito del Agua
Esta acción tan sencilla te permitirá ver que puedes ir incorporando otros hábitos saludables a tu vida. Una vez que tengas el hábito de tomar agua cada mañana, estarás listo para pensar en otras acciones que irán sumándose a tu rutina, transformándote en una mejor versión de ti mismo. Entonces podrías preguntarte: “¿Qué tan difícil sería agregar algo de ejercicio diario?”
El Impacto del Ejercicio en la Vida Diaria
Una caminata de 20 o 30 minutos aportará mucho a tu bienestar: mejorará el control de peso, elevará tu ánimo al estimular sustancias como la serotonina, aumentará tu energía, fortalecerá tus músculos, mejorará tu sueño, tu salud cardiovascular y te ayudará a gestionar el estrés. Además, el ejercicio genera hormonas de la felicidad. Y cuando ya tengas el hábito de ejercitarte, podrías sumar otro más, como mejorar tu alimentación. Podrías proponerte incluir un plato diario de comida saludable y balanceada que te brinde los nutrientes necesarios para fortalecer tu sistema inmunológico y reducir las probabilidades de enfermarte, además de proporcionarte más energía.
La Alimentación: Tu Nuevo Aliado
Con esta sinergia de cambios positivos, verás cómo el ejercicio y una buena alimentación serán una base sólida que te ayudará a realizar tu trabajo o proyectos personales con más entusiasmo, mejor actitud y mayor eficiencia. Con el tiempo, esto te irá posicionando mejor en tu campo, brindándote mayores oportunidades de crecimiento. Y así, paso a paso, irás sumando pequeños cambios que transformarán tu vida y mejorarán tu calidad de vida.
Pequeños Cambios, Grandes Resultados
Piensa en tres cosas que te gustaría hacer para mejorar tu vida y elige la más sencilla de incorporar. Empezar con algo pequeño te permitirá progresar sin abrumarte, hasta que puedas adoptar más cambios. Para generar un nuevo hábito, la clave es crear un sistema que facilite la incorporación de esa nueva conducta. Si quieres, por ejemplo, empezar con tomar un vaso de agua todas las mañanas, pon en tu buró el vaso con agua para que sea lo primero que ves al levantarte. Si quieres mejorar tu alimentación, prepara algunos alimentos saludables la noche anterior, como frutas o nueces, para llevar contigo al día siguiente. Esto evitará que caigas en la tentación de comprar comida chatarra. Si tu nuevo hábito es llegar temprano al trabajo, adelanta tu alarma unos minutos y deja lista la ropa que usarás al día siguiente.
El Ejemplo del Bambú Japonés
Imagina el crecimiento del bambú japonés, una planta que puede llegar a alcanzar hasta 30 metros de altura, pero que pasa años desarrollando raíces profundas antes de mostrar crecimiento visible. Durante ese tiempo, quien sembró el bambú podría pensar que la planta no está prosperando, ya que no se ve ningún cambio en la superficie. Sin embargo, bajo tierra, las raíces están fortaleciendo la base para un crecimiento rápido y notable en el momento adecuado. Utilizo este ejemplo para recordarte que el secreto de un cambio significativo radica en crear un sistema de raíces sólidas que sustente los cambios que deseas lograr. Si quieres alcanzar lo que para otros parece imposible, empieza construyendo una base y agregando cambios uno a la vez, hasta que te conviertas en una persona que tiene equilibrio y logra sus objetivos.
El Camino Hacia la Excelencia
No necesitas ser un superhumano para alcanzar este nivel de organización y calidad de vida. Solo necesitas claridad sobre lo que quieres lograr, y luego disciplina y constancia para conseguirlo.
"La excelencia es el arte de ganar pequeñas batallas todos los días." - Robin Sharma
